miércoles, 4 de abril de 2012

Los amigos de la justicia

     Si yo supiera que escribiendo lo que escribo no me lee nadie, tendría una úlcera de estómago de las gordas. Como todo el que escribe, la necesidad de que lo lean a uno que ya tiene en vena el veneno que le dan los lectores, se convierte en una necesidad casi fisiológica que raya en la neurosis. Lo normal. Pero cuando lo que escribes no es una historia ficticia sino una denuncia, la necesidad de que te lean sí es terapéutica y no es ninguna broma.  La noticia la escuché en la radio:
     Un juzgado de Madrid concede a Gonzalo Pascual, socio del ex presidente de la CEOE en Viajes Marsans, (véase Diaz Ferrán) una pensión de alimentos de 2500 euros mensuales. Al oírlo sufrí una reacción en cadena: náuseas, trágica caída de la cama, golpe con en la cabeza con la esquina de la mesita de noche, carrera al cuarto de baño y vomitona en la taza del wáter la cena de la noche anterior. Este hombre pidió una pensión de alimentos de 6000 (seis mil) euros mensuales para él y su esposa al juzgado de lo mercantil número 9 de Madrid porque según su escrito presentado, el matrimonio se encuentra en una “situación de precariedad económica” desde que le declararon en concurso de acreedores. Hasta el punto de que “ha debido procurarse alimentos por medio de los escasos préstamos que les han dado las personas más allegadas.” El juzgado va y accede a la petición de alimentos de Gonzalo Pascual, pero rebaja sus pretensiones hasta los 2500 euros mensuales. Al tio se le quedó una cara como a Benny Hill cuando miraba a cámara riéndose.  A todo esto cito: “las cuatro grandes empresas del sector turístico han denunciado a este hombre y el ex presidente de la CEOE, por un supuesto delito de alzamiento de bienes y denuncian que la presunta situación de quiebra es ficticia, porque tanto Díaz Ferrán como Pascual han ocultado la mayor parte de sus activos para evitar su embargo y el pago a los acreedores”.
Este hombre ha pasado a sus hijos parte de su patrimonio “con reserva del derecho a disponer el 95% de lo donado lo que evidencia que tales bienes siguen bajo su control y ha ocultado bienes en México, Holanda y Portugal, donde dispone de dos fincas de más de 800 hectáreas en total”. Después de digerir todo esto, lo de siempre. Paisaje desolador. Familias enteras en el paro, familias desahuciadas, trabajos basura por 450 euros, una reforma laboral que sobrepasa con creces los sueños y anhelos de cualquier empresario y aquí paz y allí gloria. ¿Qué les pasa a los jueces de este país? ¿Por qué no despiertan de Matrix y bajan a la realidad?. Encierran a ladrones de gallinas y ponen pagas millonarias a empresarios estafadores de guante blanco. Yo no sé qué más circunstancias se tienen que dar para que pase algo gordo y haya una guerra de clases pero no estamos muy lejos de aquella Francia de las guillotinas. Que sí que muy terrible y todo eso. Pero ya eso se me antoja pura higiene. 

                                            José Miguel Casado ©


 


3 comentarios:

  1. Me imagino que habrá más gente (y algún día mucha más) que te lea como yo lo hago cada Achtung. No te dejes llevar por el "arturismo" y tú sigue a lo tuyo, anda.

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    1. Si es que me sacan de mis casillas y desenvaino la toledana y la vizcaina y me tengo que tirar a degüello pa que me cescuche leñe

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  2. Además no será por que no tengo razón

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